El avance sin frenos de las consecuencias del cambio climático está provocando una apuesta sin precedentes de energías renovables en todo el mundo. La tecnología avanza y las nuevas formas de generar energía limpia surgen de forma inesperada. Sabíamos de la versatilidad de la solar fotovoltaica, pero a lo mejor no nos esperábamos las placas solares flotantes.
Así es, como lo oyes. La energía solar fotovoltaica puede instalarse en superficies acuosas provocando numerosas ventajas para todos. Sin embargo, ¿Qué son las placas solares flotantes? ¿Qué ventajas y porque hay que apostar por este tipos de sistemas? Continúa leyendo y encontrarás todas las respuestas. ¡Allá vamos!
Como su propio nombre indica, las placas solares flotantes son instalaciones fotovoltaicas que se realizan en suelo marítimo, pantanoso o acuoso. En definitiva, es otra expresión y configuración diferente de la energía solar, cuyo uso, se está extendiendo cada vez más por sus grandes virtudes en todo el mundo.
En teoría, cualquier espacio rodeado de agua valdría para instalar unas placas solares flotantes. Ya sea en océanos, en lagos, presas o pantanos, todos son terrenos válidos para la colocación de módulos fotovoltaicos. Eso sí, unos lugares tienen más ventajas que otros. Por ejemplo, si instalamos en el mar, habrá que tener en cuenta la mayor deterioración de los paneles por la sal y la suciedad.
A pesar de puntuales inconvenientes, es importante conocer las ventajas de las placas solares flotantes. Dentro de muy poco tiempo, estas serán ya un habitual en zonas donde necesiten de energía limpia, pero no tengan terrenos para hacerlo. A continuación, te explicaremos mejor esta afirmación junto a otras ventajas:
Puede que nos resulte poco seguro o raro ver placas solares flotantes, pero la realidad supera a la ficción. Es decir, cada vez más países (incluido España) están apostando por este tipo de instalaciones por los grandes beneficios que aporta, pues es otra forma alternativa de crear energía renovable. Pero, ¿Por qué hay que aportar por este sistema? Vamos a explicártelo:
Nuestro país no iba a ser una excepción en el uso de esta moderna tecnología. Tenemos la mayor cantidad de horas de sol de toda Europa y necesitamos aprovecharlas. Según el último estudio del Ministerio de Transición Ecológica, existen algo más de 100 embalses en nuestro país con capacidad de instalar placas solares flotantes. Estos son algunos ejemplos:
Muchos pensaréis que la instalación de placas solares flotantes tiene un impacto negativo en la naturaleza que rodea la instalación y el medio ambiente. En principio, este tipo de instalaciones solo afectan a la vegetación o algas que habitan debajo de ella. La razón es simple: La luz no llega a estos organismos y no son capaces de realizar actividades básicas como la fotosíntesis.
Por otro lado, no hay estudios ni datos que verifiquen que los animales sufran un impacto negativo por las placas solares flotantes. Podría haber un único problema si hablamos de zonas de pesca. En este caso, las redes podrían mezclarse con las estructuras y generar un impacto negativo, tanto para la propia instalación como para los peces.
El mundo de las renovables no para de actualizarse y las placas solares flotantes son un claro reflejo de ello. En pocas palabras, son estructuras que incorporan módulos fotovoltaicos y están situadas alrededor del agua. Sin duda, las ventajas superan a los inconvenientes y ya los estamos viendo con la alta aceptación de proyectos de esta índole.
La mayor eficiencia de las placas solares flotantes, las hacen muy atractivas de cara a los inversores. Recordamos que puedes sacar un 10-15% más de rendimiento en comparación a las instalaciones terrestres. Además, pueden servir como complemento en centrales de generación. La energía solar sobre el agua ha llegado para quedarse y España seguro que será un referente.