En un momento en el que todo el mundo habla de los altos costes energéticos, surgen nuevos métodos para mitigar este problema global. Concretamente, en este post, hablaremos sobre la agrovoltaica, una nueva forma de autoconsumo que en unos años se situará como referente en el sector de las renovables por su gran potencial.
Y ya no solo es por interés personal, sino que este tipo de autoconsumo conlleva numerosos efectos positivos de cara a la lucha contra el avance del cambio climático. Sin embargo, ¿Qué es la agrovoltaica? ¿Cuál es la situación en España? ¿Existen proyectos? Como avance, te comentamos que este tipo de sistemas están muy poco desarrollados, pero las grandes compañías saben que el futuro viene por aquí.
En realidad, hablamos de un término un poco confuso que no tiene una definición oficial. Sin embargo, entendemos como agrovoltaica, ese tipo de ecosistemas que combinan la superficie agrícola con instalaciones de autoconsumo fotovoltaico. En definitiva, es otro tipo de aplicación que complementa a las placas solares flotantes, comunidades energéticas locales, etc.
El objetivo principal es buscar un win-to-win. Es decir, que ambos sistemas se beneficien de las ventajas que ofrecen cada uno, tanto el suelo como los módulos fotovoltaicos. El boom de la energía solar ha llegado para los tejados de empresas y particulares, pero ¿Qué pasará cuando estos se acaben? Aquí entrará en juego la agrovoltaica, cuyo nivel de instalación es mucho más amplio.
Muchos no somos conscientes del impacto que generaría el desarrollo de proyectos de agrovoltaica en España. Sus ventajas darían para realizar otro post, pero para que no te quedes con la miel en los labios, vamos a hacerte un pequeño resumen de lo que ofrecen este tipo de integraciones. ¡Vamos allá!
La agrovoltaica no puede implementarse de la misma manera cualquier lugar, recordemos que cada suelo o tierra tiene un uso diferente. Aquí entra un factor muy importante, la inclinación de los módulos fotovoltaicos, el cual, va a determinar la producción energética y el desarrollo de la planta. Consideramos tres tipos:
Por catalogarlo de alguna forma, la existencia de proyectos de agrovoltaica en España es inexistente. La razón no es la inoperancia o la falta de desarrollo, sino la falta de claridad de las administraciones públicas en reconocer y crear una legislación sólida alrededor de estos planes que serán el futuro de la energía solar fotovoltaica.
Los agricultores, y la gente en general, está muy mal informada. Saben que la energía solar está ahí, pero no saben su verdadero potencial. La agrovoltaica en España es una oportunidad única para realizar las siguientes actuaciones:
La situación de la agrovoltaica en España es imaginaria, pues no hay un texto legal claro que defina este tipo de proyectos. En definitiva, no se sabe a qué sectores afecta, si existen ayudas o los pasos para realizar un proyecto de estas características. Estos son algunos de los problemas más frecuentes:
Los anteriores problemas han afectado y los están haciendo a la falta de proyectos de agrovoltaica en España. Actualmente, podemos encontrar pilotos sobre todo en viñedos, campos de manzanas o melones y en plataneras. La intención de muchos agricultores está ahí, pero el desarrollo e impulso por parte de la administración es inexistente.
Y puede que estamos desaprovechando el tren de la agrovoltaica aquí en España. Se calcula que en nuestro país existen más de 23 millones de hectáreas de superficie agraria útil. Mientras estamos esperando a que se acaben de ocupar tejados de residenciales e industrias, Alemania o Países Bajos ya nos llevan una gran ventaja.
Ya lo hemos visto, la agrovoltaica es una de esas oportunidades de negocio que no hay que dejar escapar por todas las ventajas que aporta a los agentes implicados. Ya sea el propio medio ambiente, la ganadería, los agricultores o municipios con poco desarrollo económico y demográfico, la combinación de la agricultura con la energía solar fotovoltaica es el tren que están esperando.
El problema es la gran cantidad de barreras que existen. Con ello, nos referimos a una falta de proyectos que sirvan como guía y una legislación inexistente. Sin embargo, primero deberíamos definir como país cómo es la agrovoltaica y qué tipos podemos encontrar. Una vez llegado a ese punto, qué comience la inversión pública y privada y nos uniremos a nuestros vecinos del norte de Europa como principales potencias.